¡¡Yo no voy de rebajas!!

¡Ja!, ¿y quién se cree eso?. No me lo creo ni yo aunque todas las temporadas digo lo mismo. Es un propósito que me hago año tras año y como todos los buenos propósitos, nunca lo cumplo.

Es cierto, me agobio un montón con la cantidad de gente que hay para mirar, probar y pagar. Nunca encuentro lo que había visto con anterioridad y lo había dejado a la «espera» de las rebajas. Lo único que veo es un montón de ropa desordenada, manchada y sin botones, así que siempre cae algo del rincón de «avance de temporada», algo no rebajado, que por supuesto no es ninguna prenda de fondo de armario (lo que nos recomiendan que compremos en las rebajas) y que no me pondré hasta dentro de unos meses si hay suerte y me acuerdo de ella. Es decir, soy un desastre y como tal este año no podía ser menos y he vuelto a ir de rebajas, pero el colmo de los colmos, es que no una, sino dos veces…

La primera adquisición fue el vestido de mariquitas de Kling que os mostré en el post de «El Lago de los cisnes… y las mariquitas» y ¡milagro, estaba rebajado, ordenado,  limpio y lo he estrenado!.

Así que emocionada volví a ir de rebajas y compré, y lo que compré, ¿cuándo me lo pondré?, pues ya os contaré porque volví a caer en el mismo error de todos los años, no tengo remedio.

En fin, pero el objetivo del post de hoy, no era contaros mis aventuras y desventuras (reconozco que me he venido arriba, jajaja) sino es enseñaros qué prendas elijo de mi armario para estas ocasiones.

2

Para empezar, yo soy una chica de vestidos y faldas. Suelo ponerme pantalones de vez en cuando pero voy muchísimo más cómoda con medias, así que para ir de compras, probarme y hacerme una idea de cómo me quedará, prefiero ir con vestido y así las medias ya están incluidas.

En esta ocasión escogí un vestido vaquero de corte recto y sin mangas muy fácil de quitar y poner porque no lleva botones, con bajar una simple cremallera, listo. Y por encima me puse un jersey de punto negro con manga francesa y cuello redondo que abriga pero no agobia.

4

El bolso, como no podía ser de otra manera en mí, hiper grande, para «por si acaso», ya sabéis…

1

Y los botines negros, para que combinen con cualquier cosa que me pruebe y con un tacón de altura media y bastante ancho, que no cansa pero a la vez viste.

6

Este look me resultó muy práctico en este día «loco» de rebajas y la verdad es que aunque he vuelto a hacer el propósito de no volver a pisar una tienda en temporada de rebajas se que no lo cumpliré.

Y vosotras, ¿tampoco vais de rebajas?.

Llevo:

Abrigo: Zara (otras temporadas)

Vestido y jersey: Zara

Bolso: Pepe Jeans

Botines: Stradivarius

Si os habéis encaprichado de mi vestido o el jersey y no lo encontráis en las rebajas podéis comprar los míos en mi tienda.

circle-64

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *